Reflexión
Sí y no son palabras cortas, pero fuertes. La mayoría de nuestros problemas son por decir sí demasiado rápido y no demasiado tarde. No debemos olvidar que nuestro mejor maestro, es nuestro último error. Erramos cuando miramos hacia el ayer con los ojos del presente. Tenemos que reflexionar con más frecuencia cuando nos disponemos a juzgar a alguien. Pensemos que hay una historia detrás de cada persona y una razón por la cual son como son. Cuando queramos resolver los problemas, sonriamos y cuando queramos evitar problemas, usemos el silencio. No tengamos miedo en fracasar, para triunfar en cualquier aspecto en la vida, es necesario pensarlo, intentarlo y volver a intentarlo cien o mil veces más si es necesario.